miércoles, 6 de marzo de 2013

Hablando de Café: UN LATTE POR FAVOR



Ingredientes

  •   Café espresso
  •   Entre 3/4  y 1 taza de leche
  •   Condimentos, si quieres
  • Cosas que necesitarás

    • Maquina de expreso, con la varita de vapor
    • Jarra de metal
    • Vasos para chorros
    • Termómetro (opcional, si sabes lo que estás haciendo puedes sentir la temperatura)
    • Café expreso
    • Una taza de café o equivalente

Pasos

  1. 1
    Llena la jarra de metal con 3/4 de taza de leche si vas a añadir algo de sabor o 1 taza sin nada más.
  2. 2
    Pon un termómetro en la jarra de metal
    .
  3. 3
    Calienta la leche entre 155ºF (68ºC) y 165ºF (74ºC). Se quemará a más de 170ºF (76ºC).
  4. 4
    La varita de vapor debería estar insertada en diagonal justo bajo la superficie de la leche. Esto creará la espuma necesaria para un buen café latte.
  5. 5
    Cuando hagas la espuma asegúrate de que el vapor crea un flujo rotatorio. Una vez que la temperatura de la leche sea cálida al tacto, alza la jarra de vapor para parar con la espuma y que alcance la temperatura indicada arriba.
  6. 6
    Aprieta los posos del espresso en el portafiltro firmemente, y cierra la maquina de café y comienza a verter el chorro.

  1. 7

    La forma en que viertes el chorro es todo un arte. Un chorro perfecto tiene un corazón fluido, poco cuerpo y un poco de crema o espuma en la superficie. Un chorro perfecto se echa durante 21-24 segundos. Los espressos más dulces salen cuando el chorro se acerca más a los 24 segundos
  2. 8
    Ve un proceso alternativo debajo
  3. 9
    Vierte dos chorros perfectos en tu taza de café. No dejes que estén más de 10 segundos sin que añadas la leche. Si lo deseas, echa un poco de condimento antes de añadir el espresso.
  4. 10
    Haz la textura de tu leche girando la jarra de vapor hasta que la superficie sea brillante. Vierte la leche caliente sobre el espresso. La espuma se mezclará con la crema del espresso.
  5. 11
    Cuando viertas la leche usa una cuchara para regular la espuma. Asegúrate de que no entre espuma en la bebida hasta que hayas vertido al menos ¼ de la leche. El resultado debería ser una superficie espumosa marrón con un poco de espuma blanca en el centro.
  6. Alternativa

    1. 1
      Vierte leche en la taza dejando aproximadamente 1,5 centímetros en lo alto y añade la espuma.
    2. 2
      Vierte el espresso en el vaso lentamente. Se hundirá a través de la espuma y se asentará en el fondo, creando una espuma y café perfectos.
                             Hora si después tanto proceso un latte, por que esta delicioso ;)
con vainilla rico muy rico queda 

No hay comentarios:

Publicar un comentario